EL GRAN DILEMA.

¿Después de cuántas salidas tener sexo?, aquí no es la pregunta del millón, la respuesta es la del millón ¿cómo saber?.
Definitivamente, a la primera ¡nooooooooo!, se corre mucho riesgo y por último démosnos el trabajo de conocernos un poquito más y si no le gusta la idea chaoo no más, por qué: porque lo más probable es que si no acceden a conocernos más y no se les nota un leve interés es porque lo único que buscan en nosotras es sexo.
Si caemos en la primera cita, lo más probable es que nuestro teléfono suene solo para tener sexo y ni siquiera se les ocurra preguntar cómo hemos estado y ahí vengan nuestros lamentos y una que otra lágrima, porque nos sentimos utilizadas.
El asunto es que hay que tratar de dilatar lo que más se pueda, síiiiiiiiii, ya sé que es redifícil, pero si no se hace los resultados son catástroficos y siempre para nosotras, ellos no tienen nada que perder, nosotras sí y mucho: aguante y concentración, de lo contrario estamos fritas.
Si accedemos, luego de unas cuantas citas y nos percatamos de que solo les interesaba conocernos debajo de las sábanas no nos queda otra que olvidarse de la cara del cretino, de su nombre y borrar, pero bien borrado todo tipo de contacto (a menos que sea una relación basada en puro sexo, que siempre las hay).
RECUERDEN: Nosotras cuándo queremos y ellos a la primera y tratén de ir a la fiesta con un buen gorrito, por último utilicen la creatividad.
¿Qué extraña es la naturaleza? pero que bueno que nos da la posibilidad a nosotras de utilizar la razón en el momento oportuno, ¡cuidado! chicas ¡cuidado!, en resumidas cuentas.