Las mujeres escuchan constantemente que las relaciones sexuales asombrosas conquistan el corazón de un hombre ¡boludeces! queridas, déjame decirte que la única parte de su cuerpo que estaría feliz serían sus pequeñas pelotitas de bambi.
Es ridícula la frecuencia con la que se leen los artículos titulados 100 consejos sexuales que lo conquistaran, la mayoría son tan tontos que tú te sientes más tonta por leerlos. Piénsalo. No es tan difícil complacer a un hombre (si no está fogoso, que sería casi nunca, hazle un sándwich y ponle un canal de futboll).
Lo que no te están diciendo esos dizque expertos es que el sexo arriesgado hará que él te use y te tire (aunque, claro a veces solo buscamos sexo).
Digamos hipoteticamente, que seguiste los 100 consejos, apareciste con la lencería comestible, el columpio, los artículos de latex, las acrobacias de alcoba, además de una esfera de disco girando sobre la cama, tal vez vestías un traje sexy (que tomaste por error de un niño que ahora no tiene que ponerse en la próxima noche de brujas), diablos! se me olvidaba: lo acorralaste en la muralla contigua a la puerta de entrada (que ¡waw! mal no estuvo), en la cocina (sin importar la carencia de cortinas, por Dios no?)y hasta en la terraza, y que posaste votre jolie petite bouche que, dans ses plus intimes ¡uf!, pobre hombre...
Todo hombre quiere hacerse ilusiones de que él en todo su esplendor será el que te familiarizará con el maravilloso mundo del sexo, el será quién te enseñará algo nuevo, y que nunca haz sentido un orgasmo hasta que lo conociste, así que cuando sugieres posiciones de las que nunca él ha oído hablar sabe que ya te enseñaron, y entonces piensa por qué querría hacer yo truquitos que le enseñó otro tipo.
Y eso significa que no hace falta subirse a todas las atracciones de Disneylandia la primera vez que visitas el parque; o quieres que la próxima vez que se vean la escena en la cama sea así: juegan un rato entre las sábanas, te mira y te dice que no te puede ver a los ojos, se corre
a un lado mirando el vacío, te preguntas qué pasa, aunque ya sabes qué diablos pasa y se levanta (Pepito Grillo hiso su tarea otra vez).
Valor agregado: si encuentras un pelo largo a la mañana siguiente que no es del color de tu cabello en la toalla con la que te disponías a secar tu lindo cuerpecito... eso merece una retirada digna sin decirle absolutamente nada, que no les pase lo que alguna vez me ocurrió a mí, no causa mucha gracia...