jueves, octubre 15, 2009

ESCÓGEME! ESCÓGEME! YAAAAAAAA?


Cualquier revista de moda le dice a las mujeres que actúen como sirvientas con los hombres, como si salir con un hombre se pareciera a hacer un trabajo de obrera, ¿puedes servir una cerveza vestida con lencería provocativa?, ¿te envuelves en celofán para él?, ¿arreglas el jardín en zapatos de tacos de aguja?, ¿usas la posición del perrito? si lo haces él se va arrodillar y te va a pedir matrimonio (puras boludeces, claro si las tuvieramos) ¡ja!.
Lo que las mujeres aprenden con todo esto es a comportarse como si estuviesen desesperadas, aunque no lo estén; cuando su actitud es la de: ¡escógeme!, ¡escógeme!, lo que hacen es presionar el interruptor de la muerte del deseo masculino.
Esa es la naturaleza humana, tú te sentirías igual de decepcionada si un hombre llegara a tomar un café contigo en la primera cita cargando dos docenas de rosas y durante los primeros cinco minutos no dejara de decirte lo afortunado que es al conocerte.
Recuerdo hace algún tiempo haber salido con un tipo bastante interesante, con harto tema como para hilar una conversación entretenida, pero cometió un grave herror, por lo menos conmigo, en la segunda cita me trató de persuadir para que lo invitara a mi casa; lo único que consiguió, fue una cadena de evasivas en las siguientes invitaciones, nunca más lo he vuelto a ver... perdió el brillo...
Desde hace un par de años me auto prometí, jamás llevar a un hombre a mi casa, con quién tuviese "algo", por dos grandes razones:
1._ Soy mamá y tengo la certeza de que no sería el mejor ejemplo para mi hija.
2._El día que tenga una relación seria, recién ahí, podría pensar en la posibilidad.
Así somos, decirle a una mujer que se esfuerce más en agradar, es como decirle a un niño pequeño que se acerque al buscapleitos del colegio, el primer día de clases y le diga: "toma mi colación para el Lunch y también mis pastelistos, y como no tienes lonchera toma la mía" o durante una cita: "toma mi cuerpo, y te hice un pastel. Por favor, sé bueno, por favor cásate conmigo, hasta voy a levantar mi trasero muy alto, muy alto, como lo hacen en yoga, es tan cómodo estar patas para arriba, de verdad ¡me encanta!.
El que un hombre se acueste contigo, no quiere decir que esté pensando en el futuro.Para que él piense en algo más tiene que haber algo que respete en ti, como por ejemplo: una inteligencia firme... y.... un cerebro fuerte, etc, etc...
Te conciderará un proyecto cuando cuando añadas el ingrediente principal: RESPETO, y el respeto es el pegamento que mantiene todo unido.
Por ejemplo, si no le gusta como te vistes en cierta ocasión, le podrías decir algo así como: "Mira Versace, este traje siempre ha estado bien y tampoco he recibido quejas sobre el maquillaje. Pero si quieres, te aviso cuando me lo vaya a poner, entonces si no me quieres ver vestida así, no tienes que venir".

"HE DICHO".

1 comentario:

eumelvi dijo...

Está usted enlazada en mis favoritos. Grcias por seguir mi blog.
Un abrazo.